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lunes, 2 de noviembre de 2015

Evangelismo Bíblico Parte XX

Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en q podamos ser salvos.: Ser Salvos, Otro Nombre, Podamos Ser, Hay Otro, Nombre Bajo, Hay Salvación, Otro Hay, Men, Ningún Otro

C. Jesús y la salvación según el Budismo
Los budistas podrían considerar a Jesús como un maestro o un guía espiritual, pero definitivamente no lo perciben como Dios o como el Salvador del Mundo.

En cuanto a la salvación, la posición budista es muy similar a la posición hinduista, porque su mayor objetivo es el nirvana, un estado donde hay paz total, sin sufrimiento y sin deseos. A fin de alcanzar este estado de gozo, los budistas deben encontrar el camino central, evitando todos los extremos de la vida. Para ello deben seguir las Cuatro Verdades Nobles enseñadas por Buda:

1. La primera verdad noble: cada persona debe aceptar la realidad del sufrimiento (dukka) en su vida.
2. La segunda verdad noble: cada persona debe aceptar que todo es impermanente (anicca) y cambiante. El sufrimiento es causado por el deseo de lo impermanente.
3. La tercera verdad noble: la forma de eliminar el sufrimiento es dejando de tener deseos y antojos.
4. La cuarta verdad noble: seguir el camino de las ocho vías para adquirir las actitudes y las acciones que conducen a eliminar el deseo.

El camino de las ocho vías
Los ocho puntos se dividen en tres principales categorías: SABIDURÍA (Panna), CONDUCTA ÉTICA (Sila) y DISCIPLINA MENTAL (Samadhi).

SABIDURÍA:
1. Correcto entendimiento: aceptar las cuatro verdades nobles y el camino de las ocho vías.
2. Correcto pensamiento: renunciar a todo apego hacia nuestros deseos y a nuestro yo ilusionario para lograr una perspectiva fuera del yo.

CONDUCTA ÉTICA: (acciones)
3. Lenguaje correcto: hablar la verdad y hablar bien de otros.
4. Comportamiento correcto: abstenerse de quitar la vida (no solo a humanos sino también a los animales), abstenerse de robar, abstenerse del comportamiento inmoral, abstenerse de mentir y abstenerse de embriagarse.
5. Vocación correcta: llevar una vida que no infrinja las enseñanzas de Buda.

DISCIPLINA MENTAL: (actitudes)
6. Esfuerzo correcto: luchar contra el mal y evitar los malos pensamientos; de esta manera se promueve el bien.
7. Conciencia correcta: pensar claramente acerca de los eventos de la vida personal.
8. Meditación correcta: lograr el gozo de la iluminación.

Así pues, en el Budismo, la salvación se logra a través del propio esfuerzo y la autoiluminación. No hay necesidad de Dios, y no hay necesidad de un Salvador del pecado, pues el concepto de pecado no existe; más bien, se habla de errores e ignorancia que se reflejan en el deseo de aquello que no es permanente. Entonces el hombre es capaz de liberarse a sí mismo de ese dominio de la ilusión y lograr el estado de nirvana, en donde el yo y el ego están extinguidos.

En el Budismo no hay una enseñanza moral, sino que el hombre debe vivir de modo correcto. La falta se atribuye mayormente a la ignorancia y puede acarrear la pérdida del nirvana, lo que obliga a una nueva reencarnación.

Según algunos estudiosos, Buda describió al nirvana como la esfera de la nada, la esfera de la percepción y de la no percepción... el final del sufrimiento. Además, él consideró que la cuestión de la otra vida no conduce a la edificación y que lo importante para el hombre es extinguirse para huir de todo deseo. En otras palabras, la esencia del nirvana es el estado del no-ser, donde se logra la extinción del fuego del deseo.

La enseñanza budista sostiene que la no-existencia es la única esperanza para escapar de los dolores de la vida. En otras palabras, en el nirvana, el vacío es lo único real.

El Budismo busca afanosamente la emancipación de todas las formas de pensamiento dualista, que rechaza. Predica que aceptar la existencia de algo implica dar a luz a su contrario (es decir, el amor y el odio, la alegría y el miedo, etc.), lo que resulta en una dualidad de “bien” y “mal” que niega absolutamente.

CRISTIANISMO BÍBLICO
- La Biblia enseña que Jesucristo es Dios, es el Maestro, el Salvador y el Redentor, y nunca negó que fuera Dios (Jn. 1:1, 14; 14:6, 11; Mt.17:5; 2 Jn.1:7; Col.1:15-17; 1 Jn. 2:22). Él enseñaba con autoridad, aunque con humildad decía que hablaba en nombre del Padre que lo había enviado, pero obraba milagros con el poder inherente a su condición divina. Los demonios a los que expulsaba sabían perfectamente que él era Dios y todavía sus seguidores expulsan los demonios en la autoridad de su nombre. Además, Jesús, como Verbo divino que es, siempre invitó a los hombres a venir hacia él, y aunque murió, resucitó y se sentó a la diestra del Padre, y prometió estar con todos sus fieles seguidores hasta el fin del mundo (Mt. 28:19, 20). En cambio, Buda nunca afirmó que era Dios y cuando murió, su cuerpo quedó en la tumba y no resucitó.
- A través de la fe en la muerte de Cristo y reconociendo que Cristo llevó una vida perfecta, el hombre escapa del juicio de Dios por el pecado y puede vivir eternamente con Dios (Rom. 5:1, 9, 10; 1 Ts. 4:17, 18; Ap. 7:9, 10). Aquellos que mueren sin poner su fe en Cristo sufrirán el tormento eterno en el infierno pero aquellos que confían en Cristo, vivirán para siempre con él (Ap. 20:11-15; Jn.14:1-3).
- Cristo ofrece en las Escrituras de la Biblia la promesa de la vida eterna con él en gloria y paz interminables. En la Biblia, Dios es la fuente de todo bien y para llegar a donde está él, necesitamos creer en Cristo y vivir conforme a su voluntad. Así pues, Cristo predicaba la realidad del pecado y la necesidad de arrepentimiento, como único medio para obtener la salvación.

CÓMO COMPARTIR EL EVANGELIO EN ESTE CONTEXTO CULTURAL Y RELIGIOSO

Qué hacer

- Permita que los budistas le brinden una explicación de sus creencias y prácticas particulares.
- Educadamente comparta historias de la Biblia que ilustran el amor y el perdón de Dios.
- Enfatice el perdón exclusivo encontrado solo en Jesús a través de la fe.
- Esté consciente de las concepciones erróneas que pueden tener los budistas acerca del Cristianismo debido al desconocimiento de la Biblia.

Qué no hacer

- Asumir que todos los budistas creen o practican las mismas cosas.
- Hacer chistes de las prácticas o creencias budistas tales como la meditación, el yoga, los mantras, los rituales, las ofrendas en los templos, etc.

PARA REFLEXIONAR
El Budismo, tiene un tratamiento muy favorable en los medios de comunicación porque coincide con el pensamiento moderno de desconocer o ignorar a Dios. El Budismo se promociona en videos, y documentales y vemos cómo dan testimonio del mismo algunos personajes populares. Tristemente, el objetivo del Nuevo Orden Mundial es propiciar hombres conformistas y sin aspiraciones, que guiados por una ética humanista sin Dios faciliten la consecución de sociedades civiles estructuradas para someterse a la tiranía del Nuevo Orden Mundial por no tener capacidad de respuesta.

El Budismo es promocionado porque un aumento de sus adeptos alejaría a más hombres de la Verdad y de Dios, lo que facilitaría el control social.

Como el sistema no puede, a nivel general, extirpar del corazón del hombre el sentimiento y el impulso hacia un ser superior, pretende sustituir lo divino porque lo considera sustancialmente peligroso. Así se impulsan los movimientos sectarios y la New Age – que distorsionan al máximo la transcendencia – y el budismo, una filosofía atea – que desconoce y niega la necesidad del alma humana de acercase al Dios vivo y verdadero, revelado en la Biblia.

El Budismo tiene sus atractivos; entre ellos se encuentra el deseo de vitalidad espiritual en medio del vacío de la vida secular, la promesa de la paz interior, y la necesidad de un código ético explícito. Pero, el Budismo, y el Cristianismo tienen una diferencia esencial en el modo de entender el mundo. El mundo (el planeta tierra) es para el cristiano que lee la Biblia una creación de Dios; por lo cual no hay necesidad de realizar un desprendimiento tan absoluto de todo lo que le rodea para encontrarse a sí mismo en lo profundo de su íntimo misterio mediante técnicas de meditación, sino que las obras de Dios en la naturaleza revelan su carácter y nos llevan a adorarle en espíritu y en verdad; además, mediante la revelación escrita de la Biblia podemos conocer sus atributos y rendirnos en gratitud y amor al Rey de la gloria.

El discurso budista ofrece una enseñanza pacífica, sin prejuicios, e inclusiva que puede hacer que su atractivo siga creciendo. Al ofrecer una espiritualidad supuestamente libre de cargas doctrinarias y de toda autoridad, puede atraer a las almas hambrientas que buscan plenitud y significado. Entonces, para cualquiera que está desilusionado a fondo con el mundo contemporáneo, y consigo mismo, el Budismo puede ofrecer muchos puntos de atracción, como  la sublimidad trascendente de sus sutiles pensamientos de cuentos de hadas, el esplendor de sus obras de arte, la magnificencia de su influencia sobre vastas poblaciones, y el decidido heroísmo y refinada calma de aquellos que están inmersos en él. Sin embargo, nunca podrá ofrecer una solución real y efectiva al problema del pecado porque solo en Cristo hay perdón, reconciliación con Dios, paz genuina y vida eterna.

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